La diabetes puede aparecer de forma silenciosa, pero existen algunos síntomas que te pueden alertar:
Si tienes muchísima sed todo el rato y, encima, vas al baño más a menudo de lo normal.
Si sientes que te comerías el mundo entero, pero aun así adelgazas sin darte cuenta.
Si te notas muy cansado, sin razón aparente.
Si tienes más de uno de estos síntomas, acude a tu enfermera para salir de dudas, de forma presencial, para que pueda hacer una valoración más específica.